Que hace tiempo que no publico? Pues si, toda la
razón. Que os lo compenso con esta super receta? Pues también, porque esta
receta tan deliciosa de tiramisú os quitará los sentidos! Tópico? Quizás...
Realidad? También....
Y es que últimamente voy bastante ajetreada
aunque también es verdad que me encanta; no lo puedo negar.
He estado haciendo algunas presentaciones del
libro, a la Feria de Reus y en Torredembarra con la Asociación de vecinos de
Baix a Mar. Tengo que decir que esta última me hizo muy feliz, con un ambiente
cálido y casi cómo en familia, que sólo este barrio es capaz de hacerte sentir.
Pero claro, cada vez que hago una, me paso la
semana haciendo los preparativos y los últimos días horneando cupcakes para que
todo el mundo pueda probar y que sepan qué recetas están comprando.
Y los que saben como voy, saben que lo hago todo
a altas horas de la noche... Así que parece que ahora que ya no me quedan
presentaciones, ya puedo publicar un post.
Este tiramisú no es ni mucho menos, receta mía,
sino que es la de mi tía Anabel. Desde que recuerdo, siempre que hemos ido a
comer en casa mis tíos, recuerdo a mi madre como por el coche iba pensando en
voz alta, el delicioso tiramisú que comería. Daba igual el menú que hubiera,
siempre y cuando el postre fuera este. Un buen día, y empezando con el blog, le
pedí la receta pero por algún motivo no la hice nunca (cosas de estas
inexplicables, que pasan).
No hace mucho que encontré la receta que ella me
apuntó en el mismo plástico de los “bizcochitos” de la marca Fontaneda, porque
básicamente la adaptó de allí.
Lo hice y lo llevé a casa de mis padres y no hay
que deciros lo que pasó. No hace falta que os diga que la fulminaron, en
cuestión de minutos. Y es que es infalible.
Este 12 de Octubre, mis padres hacían años de
casados y cómo que mi padre ya hacía tiempo que me pedía el tiramisú una y otra
vez pensé que sería un buen regalo. Dicho y hecho, presentado y comido!
No esperéis un tiramisú fuera de la normal, con
ningún ingrediente especial ni extraño. Es el clásico, el de siempre, de
aquellas cosas que las de siempre, funcionan.
Espero que os guste tanto como en mi casa!
TIRAMISÚ DE MI TIA
Para una bandeja de 32cm22cm
Ingredientes:
550 gr de mascarpone
2 huevos
120gr de azúcar
100 gr de nata de montar (opcional)
300 gr de “bizcochos” (fontaneda)
2 tazas de café fuerte
1 vaso pequeño de licor de café
Cacao en polvo
Chocolate para decorar
MÉTODO:
Separamos las claras de las yemas de los huevos.
Batimos las claras con 75 gr azúcar hasta que
quede una mezcla blanquecina.
Añadimos el mascarpone y batimos hasta que quede
homogéneo.
Por otro lado, batimos las yemas y el resto del
azúcar, hasta que queden a punto de nieve y las añadimos a la mezcla del queso.
Lo mezclaremos con cuidado, con una espátula y movimientos envolventes.
Apartamos.
Opcional: podemos añadir un poco de nata
previamente montada.
En un bol, ponemos las dos tazas de café y el
licor y mojamos los bizcochos (yo hago como ella, muy rápidamente y dos veces
por cada lado).
Los vamos poniendo uno junto al otro en una
bandeja, encima de la mezcla de antes y con un colador espolvoreamos cacao.
Volvemos a poner otra capa de bizcochos y una de
crema. Dejamos reposar en la nevera, todo un día si puede ser.
Justo antes de servir espolvoreamos el cacao en polvo
por la superficie y tachamos chocolate.
NOTAS:
- En las fotografías veréis que he puesto tres
capas de bizcochos. Sí...soy una avariciosa... Doblé las cantidades.
- En una de las ocasiones me pasé a la hora de
montar las claras de huevo, de forma que me quedó una crema demasiado espesa.
Estaba buena igual, pero no resultaba tan cremosa y por lo tanto no se integró
del mismo modo con los bizcochos. Así que tenedlo en cuenta.
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