Quiero ser una top model y galletas de pecado



Pues sí, he decidido que quiero ser una top model. Ahora viene cuando, justo después de esta frase colgaría un emoticono con una gota de sudor que le baja por la cara.
Sobre todo si leéis la frase cuando debajo hay fotografías, unas galletas rellenas de caramelo y Nutella que hacen salivar sólo de mirarlas.
 A menudo nos encontramos comparativas de celebritis; imágenes de ellas en un estudio y posteriormente pasadas por Sant Photoshop y justo al lado, otra fotografía saliendo de casa donde se les ven todos los defectos que puedan tener. No me refiero a estas celebritis, ellos/ellas son como cualquiera de nosotros pero con unas dotes interpretativas que hacen que cobren cifras millonarias. Mi frustación va por otro sitio. Va por periodistas de espectaculares ojos azules, con maridos superperfectos, va de supermodelos tan naturales y tan preciosas a la vez, va de Gisele Bunchen, va de Úrsula Corberó... 
Pensaréis muchos de vosotros que estas tres precisamente no son santo de vuestra devoción y hombre, en algunos aspectos tampoco de la mía. Mi envidia viene de...
Cómo cada mañana, un Lunes, llego a la consulta. A menudo ya estoy cansada y más, ahora en verano. Me he levantado tant justa que ni siquiera he pensado en lo que me ponía y realmente, no voy muy favorecida. He intentado hacerme una cola con el cabello pero no lo parece; ayer por la noche hice tarde y me duché justo antes de ir a dormir, con los cabellos un poco húmedos y cuando estos se secan a su aire....pues esto, que acaban a su aire, cada uno en una dirección.
 Por el coche me doy cuenta que no me he puesto corrector en los ojos y un ligero tono azul los rodea. Me pongo las gafas de sol, a ver si disimulo un poco. Bajo del coche y me noto los shorts un poco ajustados, signo inequívoco que he cogido un poco de peso. Últimamente mi dieta no está siendo ejemplar, precisamente, el verano me altera los sentidos!Llego, abro las persianas, pongo hilo musical, me cambio con la ropa de trabajo y cuando miro el reloj veo que me quedan diez minutos. Decido revisar el correo electrónico. Cuando acabo y lo cierro...."Txa txan!!" , me salen unos pequeños cuadros por toda la pantalla, algunos publicitarios y otros una especie de noticias de celebritis.
Nunca me había parado a mirarlo, nunca había visto todo aquello hasta aquel momento, y.....y....maldigo aquellos diez minutos!
Ante muchas ventanillas cambiantes, letras de colores, mensajes publicitarios....destaca por encima de todo una notícia, una de aquellas imprescindibles para la humanidad!
Hablaba sobre las días de descanso de Sara Carbonero e Iker Casillas y mi dedo índice actuó solo, como en un impulso y picó encima del titulito. Puede haber muchísimas opiniones sobre esta periodista y se la ha criticado mucho , sobre su profesionalidad y que si es por su físico que está donde está. Yo siempre la defiendo y cuando más la critiquen, más la defenderé. El éxito absoluto a veces despierta una envidia poco sana y por desgracia....hay mucha. Qué si está allí por el físico? El caso se que está allí y hace tiempo y aguanta. Con sólo que hagas unas cuántas gestiones al día, veréis que hay muchísima gente muy incompetente ocupando lugares que no merecen y no son ni la mitad de guapos!
 

Bueno, pues a lo que voy. Salen las fotografías de la parejita durante sus vacaciones y...y...no sé, no es justo. La chica sale impecable, con la melena que le cae por la espalda, brillando y medio ondulada, una barriga que es imposible pensar que hace sólo meses que ha dado a luz y ni una gota de sudor.
Pienso cuando yo voy a la playa. A menudo me tengo que recoger el cabello si no quiero que se me empiece a pegar por toda la cara, a los pocos minutos de estar allí. Sudo y me resbala la crema protectora, espesa, de factor 50 porque sino me quemo. A todo esto se le suma un protector todavía más fuerte en los labios, que cuando me lo acabo de poner parece que me haya bebido 20 vasos de leche. Si no lo hago, a los dos días me salen pasas. 

El bikini casi nunca queda del todo perfecto, cuando no me cuelga la parte del culo, queda asimétrico, que si me ligo demasiado fuerte los cordeles al cuello...
Me miro y pienso que debo de estar horrible. Y vuelvo a mirar las fotos de la Carbonero.
Imágenes de Gisele Bunchen a un festival de verano, con unos simples shorts y una camiseta sencillísimos y que lleva con la misma elegancia que un vestido largo. En un solar árido, desierto y a menudo pantanoso ella queda allí, impecable, con una luz especial, sin una gota de sudor, no se le enganchan los cabellos al cuello y ni siquiera se le ensucian los zapatos.Yo no hace falta que vaya a un festival para llegar a casa con condiciones muuuucho peores.
En fin, que quiero ser una supermodelo o superperiodista de ojos azules, quiero estar siempre impecable....
 Pero que digo? Si así fuera....no podría ensuciarme los dedos mientras como un croasant de chocolate, no? No podría mojar los dedos en la buttercream? Y tampoco podría acabar con la cara llena de harina después de cocinar?
Nooo.... pues, puesto que el físico nunca lo tendremos y esto de estar perfectos no va con nosotros, comemos y comemos dulces como estas supermega galletas, que nos manchemos de caramelo y de Nutella y nos lamemos los dedos y hagamos una sonrisa con los dientes negros del chocolate, pero una sonrisa de felicidad absoluta.
 Y por los que sois como yo, aquí va la receta. Esta extraída de Top With Cinamon, un nuevo descubrimiento que me inspira, me encanta e incluye un tutorial en vídeo que va genial para seguir los pasos.
Buen provecho!
GALLETAS DE CARAMELO Y CHOCOLATE
Receta extraída de Top With Cinamon
Salen unas 7-8 galletas
Ingredientes:
110 gr de mantequilla
350 gr de azúcar moreno
55 gr de cacao en polvo
2 huevos
1/4 de cucharilla de sal
3/4 de cucharilla de levadura en polvo
260 gr de harina normal
100 gr de pepitas de chocolate
8 cucharadas de Nutella
7 Caramelos de estos blanditos con la cubierta de chocolate
Sal maldon
Método:
Pre calentamos el horno a 180ºC y preparamos una bandeja con papel de horno.
En una cazuela ponemos la mantequilla y la deshacemos. Apartamos del fuego y añadimos el azúcar y los huevos. Después añadimos el cacao, la sal y la levadura en polvo y vamos removiendo hasta que quede todo integrado.
Finalmente ponemos la harina y seguimos removiendo hasta que no queden manchas blancas de harina y finalmente las pepitas de chocolate.
Cogemos una cucharada colmada de masa y la ponemos encima la bandeja de horno. Con un dedo hacemos presión quedando un agujero en medio. 

 Ponemos la Nutella

 y el caramelo 


 y tapamos con más masa de galleta. 




Espolvoreamos con sal maldon.
Horneamos durante 8-10 minutos, sacamos y dejamos enfriar.

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